Y también en mi se alza la ola. Se hincha, arquea el lomo. Una vez más tengo conciencia de un nuevo deseo, de algo que surge en el fondo de mi, como el altivo caballo cuando el jinete pica espuelas y después lo refrena con la brida. ¿Qué enemigo percibimos ahora avanzando hacia nosotros, tú, sobre quien ahora cabalgo, mientras piafamos en este pavimento? Es la muerte. La muerte es el enemigo. Es la muerte contra la que cabalgo, lanza en ristre y melena al viento, como un hombre joven, como Percival cuando galopaba en la India. Pico espuelas. ¡Contra ti me lanzaré, entero e invicto, oh Muerte!

Las olas rompían en la playa.

Las olas. Virginia Woolf

sábado, 20 de julio de 2024

A toda brida. Kathryn Scanlan

Podría estar en la sección de pequeñas joyas. Como cada vez (bueno ya desde hace mucho, pero no ha hecho más que crecer) admiro más la originalidad en la escritura, este libro se lleva la palma entre lo que he leído últimamente. De estilo directo, descarnado, no sobra ni una sola palabra. Frases cortas para contarte desde cosas triviales a cosas tremendas. Bueno triviales, pocas. Es genial. Qué historia. Qué mujer. Y... caballos. Añoranza. Me ha encantado.

 

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